https://valentinamaleza.wordpress.com/2016/02/23/poco-y-a-ratos/

El ruido, la gente, la lluvia...

No ha parado de llover en varios días. Desde que amanece hasta que el sol se pone, se escucha el agua golpear las ventanas, como si quisiera entrar en casa y anegarlo todo. 

En la calle se forman riachuelos por los que podría bajar Chanquete en su barco y la gente se amontona debajo de los balcones impidiendo el paso a los cautos transeúntes como yo, que nos movemos arramblados a las fachadas como si del cielo cayera salfumán mismamente.

Pon unas Timberland en remojo y trata de moverte con agilidad.

Aún me queda más de medio camino y de pronto, al doblar la esquina, todo se para.

El ruido, la gente, la lluvia...

Tengo la sensación de haber sacado la basura.

Primer borrador de Propósitos de Año Nuevo.

Me comprometo a :

• Perder la moralidad cada vez que el egoísmo llame a mi puerta.
• Dar la importancia justa a cada embrollo, solucionable o no.
• Leer la letra pequeña de las promesas y compromisos adquiridos tan frescamente por terceros.
• Ceder un 40% de mi capacidad cerebral al subconsciente mas impulsivo, dándole total libertad de maniobra.
• Vivir en pecado tanto cómo la ética me permita.
• Amortizar la libertad que te da una mala reputación. (Benditas malas lenguas).
• Provocar.
• Desesperar.
• Desquiciar.
• Enamorar.

Soy la más negra de las ovejas.

Voy en dirección contraria.
Soy como Alfonsina Storni, que se salió del rebaño y corrió a la montaña, hastiada del llano.
Miro las ovejitas, sonrientes. Pobrecitas.
Siguen a su pastor sin cuestionarse hasta donde...


"!Pobrecitas y mansas ovejas del rebaño!
!No temáis a la loba, ella no os hará daño!
Pero tampoco riáis, que sus dientes son finos
y en el bosque aprendieron sus manejos felinos!."


Voy a seguir mi propio camino.

Mi vida no depende de las decisiones y deseos de terceros, es sólo mía y yo decido lo qué quiero y con quién quiero compartirla.
En mis manos está elegir quien quiero ser.

"El guerrero pacífico".

Estoy dejando de pensar.

Intento concentrarme en el aquí y ahora. Justo ahora.

La cultura asiática es sabia. Centrar tu energía y poner todos tus sentidos en éste preciso instante es un seguro de vida, una promesa de felicidad... 

Es un aprendizaje lento y nada fácil para alguien hormonalmente alterado y emocionalmente desequilibrado como yo.

Y como tú que, si lees esto, muy normal no serás.

Me alegro.

Somos muchos.

Olvidar todo lo que interfiere en tu camino. Sacar la basura.

La culpa de mi entrega al presente la tiene una película, "El guerrero pacífico". 

Sólo he visto los primeros veinticinco minutos. Me dormí antes de entender lo que estaba pasando pero me bastó y me sobró para tener un sueño delirante que mucho tiene que ver con tan corto rato de cine.

Llevo todo el día pensando en ello.
Quiero verla otra vez. Toda, claro.

Sólo he visto el principio y ya es una de mis películas favoritas.

Tengo la misma sensación que cuando empecé a leer "La Elegancia del Erizo", una especie de bombillita parpadeante en el estómago.

Tengo un plan 2 . "Metas, objetivos y motivación"

Cuando decidí hacer algo productivo con mi vida me planteé la siguiente pregunta:
¿Qué es lo que realmente quiero?

Parecía fácil eso de alinear tus pasiones con el universo pero, después de años siguiendo al rebaño, una está bastante desconectada con sus propios deseos, así que tuve que fragmentar ésa  incógnita en un cuestionario, que fue un gran ejercicio de reflexión.

Si eres de los que quieres cambiar su vida, coge papel y boli.

• ¿Qué quieres tener o adquirir?
• ¿Qué quieres hacer?
• ¿Qué quieres llegar a ser?
• ¿Cuales son las características personales que poseen aquellos que han conseguido dichas metas?
• Para conseguirlas, ¿cómo tengo que desarrollarme a nivel personal?

Hay que tener claro el QUÉ para que llegue el CóMO .

Y llega.

He leído mucho sobre como van surgiendo casi sin querer las oportunidades cuando centras tu atención en lo que realmente quieres conseguir, sobre cómo puedes programar el subconsciente para que Reme en tu misma dirección y sobre la fuerza que ejerce en tu destino tener una visión clara de tus metas.

Desde que empecé a escribir éste diario para hacer un seguimiento de mi aventura y medir los resultados, he comprobado que ciertamente el universo está conectado con tu energía y uno mismo puede dirigir sus pasos.

Puedes intentarlo o no.

Yo... Voy a ser la bestia.

Tengo un plan.

He decidido hacer algo productivo con mi vida.
Desde luego que mi proyecto de conversión a ciudadana activa no pasa por entregar mi tiempo, mi energía y, en general, mi libertad a cambio de un salario mínimo, un puñado de normas restrictivas y un horario más que limitador.
Aceptar limosnas por dedicarme a cumplir el sueño de otro no está en mis planes.
Puede que sea un arrebato de optimismo totalmente irracional y es probable que me desanimen los obstáculos pero tengo una promesa que cumplir y no tengo previsto tirar la toalla.
He estado perdida el tiempo suficiente como para leer bastante sobre motivación, ser competitivo, el test de la pasión, el camino a la felicidad y otros libros de auto ayuda y guías espirituales. Ya he pasado por el dolor, ya he comprobado que el karma existe... Ahora voy a "alinear mis pasiones con el universo".
Soy consciente de cómo suena, pero creo firmemente que nada es imposible, que tenemos la capacidad de lograr lo que nos propongamos y... no jodas, la vida tiene que ser algo más que trabajar para pagar el alquiler
Doy por hecho que no soy la única que se ha sentido frustrada alguna vez, así que, partiendo de ésa premisa, empecé a leer sobre cómo lo hicieron aquellos que persiguieron sus sueños hasta conseguir lo que a ojos de terceros parecía una absurdez.
Todos ésos irresponsables inconscientes que han conseguido lo imposible y ahora viven entre palmeras, contando billetes tienen una actitud parecida y siguen las mismas pautas de comportamiento.

Imita a la bestia y te convertirás en la bestia.

Tengo un plan.

Voy a ser la bestia.